¿Será que esta vez sí?
Desde que comenzó a operar el sistema de Transmilenio en la ciudad de Bogotá ha tenido el gran problema de los colados. (Personas que se suben al sistema sin pagar su pasaje).
Las diferentes administraciones que ha tenido la ciudad han ideado estrategias para superar este problema, pero sin ningún éxito. Tanto así, que a muchos ciudadanos nos parece, me incluyo, que cada una de ellas es una burla al sistema, y más que esto, a los ciudadanos que si validamos y pagamos nuestro pasaje.
Actualmente tienen en cada estación guardias de empresas privadas de seguridad, quienes, a mi parecer, son muñecos, ya que no pueden requisar a los civiles que entran al sistema, ni detenerlos. Y si se llega a armar alguna pelea, donde el civil quede herido, corren el riesgo de quedar en la alta taza de desempleados, o en la cárcel por agresión.
Día tras día, los civiles vemos como se cuelan en las estaciones cientos de personas, pero no se puede hacer nada, por el miedo a la agresión del colado, o por el riesgo de quedar preso o judicializado por meterse en temas que no le competen.
La policía, la mayoría de veces, se fija en las personas de más escasos recursos, como lo son los cartoneros.
¿ Es tan difícil poner unos torniquetes de piso a techo?
¿Es tan difícil que el sistema de Transmilenio le entregue a cada usuario que valide su pasaje, un tiquete para mostrar a las autoridades cuando se lo pidan?
No lo creo. Es pura voluntad política. Pero es más fácil hacer que la platica pase del sistema a un bolsillo particular, que a mejorar la calidad del servicio.
Esperamos la quiebra de Transmilenio... más pronto de lo que creen.
