martes, 15 de marzo de 2016

Ciudadanos protestan sin hablar

Los ciudadanos de varias ciudades del país, cansados del servicio tan deficiente que les prestan algunos taxistas, han tomado otras alternativas de transporte, en el cual en algunas oportunidades hay que pagar un poco más, pero ese pago lo justifica el buen servicio que les prestan estos carros de lujo.

Uno de estos servicios que está aprovechando esta coyuntura es UBER, tan criticado en varios países del mundo porqué llega al mercado sin una reglamentación clara para prestar esta clase de servicio.

Los taxistas tradicionales, los amarillos, cansados de la competencia, han tomado tácticas equivocadas para desestimular el servicio de estos carros, con lo cual aumentan la aceptación de este servicio especial en la comunidad.

Una de las estrategias que tomaron parte de los taxistas fue hacer operativos nocturnos, ilegales claro está, para impedir que los vehículos de servicio especial recogieran a las personas en los sitios de entretenimiento como restaurantes, bares y cinemas. La finalidad era impedir que los vehículos llevaran a sus pasajeros a su destino final, de cualquier manera.

Sin importarles quien fuera adentro de estos vehículos, el 12 de febrero agredieron el vehículo en el que se transportaba la hija del ex vicepresidente Francisco Santos, Carmen Santos, acción en donde, con palos y piedras, trataron de romper los vidrios blindados del vehículo y retener a la joven.

Ayer, lunes 14 de marzo, le midieron el pulso a la ciudad con un paro programado, el cual generó trafico en algunas zonas de la ciudad e hizo que los capitalinos se apegaran más al servicio especial que presta UBER.

Las tácticas que estos transportadores de pasajeros debería tomas, todos los ciudadanos las conocen, y los mismos taxistas, pero no hay interés de mejorar en parte de este gremio, ni estímulos por parte del gobierno para que lo hagan.

Como mínimo deberían prestarle el servicio a las personas que les paran sus vehículos en la calle, no alterar el taxímetro y aprender nuevos idiomas, además de saber en donde quedan sitios clave de la ciudad como clínicas y universidades principales.

Los ciudadanos seguiremos protestando pacíficamente contra su servicio si este no mejora, tomando las alternativas que hay en el mercado como UBER.